Soledad
Soledad que no te marchas
ni el amor puede alejarte
vives en mi y a veces creo
que ni muriendo me dejarías.
Vivo en los límites,
entre tú, soledad mía,
los amores,
las tormentas y las calmas,
la alegría y mi tristeza
que se vuelven infinitas
en mi alma.
Se entrelazan en el fondo
alegrías y tristezas
y detrás
estás tú, soledad mía.
Siempre conmigo,
a veces,
callada …
como si durmieras.
Aulis Tornero